“TRANSFORMANDO EL DOLOR"

”Sí te duele, estas viva”


Buscando la manera más precisa de iniciar esta columna, la forma más suave de abordad el tema, descubro mi querida lectora que no hay manera sutil de decir que: Duele el Alma.
El Ser Humano durante toda su vida tolera y vive con diferentes dolores. Unidades inimaginables de dolor resistimos las Mujeres como parte de nuestra vida diaria.
Acostumbradas a vivir en el dolor por el miedo a levantar la voz, porqué nadie nos ha dado la palabra, porqué nadie nos enseña a amarnos o respetarnos, porqué si nacimos siendo Mujeres la vida será más difícil.
Hacemos del dolor un elemento más de nuestra vida y si, tristemente nos resignamos a éste.
Nos duele el amor, el desamor, el ciclo menstrual, el parto, nos duele la cabeza, el corazón, nos duelen los hijos propios y los ajenos, nos duele el tiempo y los kilos de más; tal parece que estuviésemos ligadas a este sentimiento con un lazo indestructible.
Y si es verdad? y si el dolor es parte natural de nuestras vidas?...
...Hoy te invito a sanar el dolor, a transformarlo en energía que nos mueva, en motor para seguir avanzando. Pero, cómo nos desprendemos de algo con lo que hemos nacido? algo que nos vienen heredando generación tras generación.
Vamos transformando este sentimiento Dolor en un rayo de luz, en un motivo para seguir caminando, liberándonos de esa responsabilidad excesiva, liberándonos de las cosas que no nos dejan caminar.
Si estas en crisis no es malo, es muy bueno, pues ésta representa un cambio y todos los cambios son buenos, aunque duela; y es que no todos los dolores traen tormenta, ni todas las lágrimas son calamidad.
De ese dolor que llevas ahí dentro, has que renazca esa mujer empoderada, encuentra la fuerza en ese sentimiento tan latente al que tan acostumbrada estas.
Transforma el dolor en una fuerza para dar pasos firmes, para caminar sin temor. Enfócate  en tú vida, en tú cuerpo, en tú espíritu. Transforma tú dolor en acción, en amor y evolución.
Abre tus ojos y mira aquellos dones que han puesto en ti, esos con los que naciste y has que florezcan y compártelos con los demás. Eres Mujer, eres poderosa, eres capaz, empodera tu espíritu, enfócate en ti y vive para ti.
Perdona tus errores, transfórmalos en aprendizaje y continua caminado, ¡no te distraigas!, agradece a aquellos que te provocaron dolor pues ellos ya te han hecho más fuerte.
Acepta tu dolor para sanar, aprende de esta lección que te ha dado el dolor; no es fácil, ni sencillo, a  veces no es muy rápido, pero si eres constante veras resultados efectivos ya que tú tienes el poder de transformar el dolor en amor.
Se  constante, no te desampares a ti misma y ten la claridad pues tú tienes el poder de alcanzar las estrellas...

Nos vemos la próxima.

Adriana López Marañón